Esta reforma convierte un edificio protegido del corazón de Granollers en una vivienda diseñada para que toda la familia pueda disfrutar cómodamente de la ciudad.
Para los clientes y nuevos propietarios del inmueble es muy importante poder disfrutar de espacio exterior y la naturaleza, son una familia acostumbrada a vivir rodeados de naturaleza en un entorno más rural con lo que el traslado a la ciudad precisaba de introducir en la vivienda espacio exterior. Las restricciones del edificio convirtieron este requisito en el desafío del proyecto.
La cave ha sido transformar un espacio muy relacionado con la fachada en una terraza, trabajando los materiales y acabados como si fuera una terraza 100% exterior, aunque en la realidad es un interior que se puede cerrar. Toda la zona de día se abre a esta terraza que es un espació de transición entre la cocina y la sala de estar y el exterior real que se abre a una plaza con mucha vida en el centro de la ciudad.
La elección del mobiliario y la decoración incluyendo mucha vegetación y pensando el espacio como si fuera un porche abierto a un jardín junto una iluminación muy texturada han sido claves para conseguir la atmósfera que imaginamos en el diseño y para que los nuevos propietarios puedan disfrutar de la naturaleza en medio de la ciudad de día y de noche.
El resto de la zona de día es un espacio abierto en forma de L donde encontramos la cocina, comedor y sala de estar o descanso, aunque todos los ambientes estén conectados cada uno tiene su propia atmósfera.
El conjunto de la vivienda incluye tres habitaciones, una de las cuales es una suit completa con vestidor y baño integrado.
En este proyecto se cuidaron mucho los detalles tanto de mobiliario como de iluminación analizando la función de cada espacio y elemento diseñado.
